Con la actualidad de las noticias sobre evasión fiscal de políticos y empresarios en Panamá, tenemos casos similares mucho más cercanos: Gibraltar se enriquece a costa de su fiscalidad, que atrae a los evasores. Con 30.000 habitantes tiene más de 35.000 empresas offshore creadas en su territorio, y entran millones de cajetas de tabaco de forma opaca, imposibles de consumir por esos 30.000 ciudadanos aún contando con el turismo. No obstante, absolutamente nadie mete mano en ello.
Llevamos múltiples días y semanas despertándonos con el destape de nuevos casos de fraude fiscal por la parte de políticos, empresarios, intelectuales… que desvían los fondos que deberían abonar para sostener el estado donde se hacen ricos a un paraíso fiscal. Todos pagamos nuestros impuestos religiosamente, y resulta que los que más tienen no quieren dar ni un céntimo al estado, a los servicios que sostienen los ciudadanos que trabajan en sus empresas, leen sus libros y les votan. ¡Es indignante!
La noticia más famosa de las últimas publicadas ha sido el de los famosos Papeles de Panamá, mas tenemos un paraíso fiscal mucho más próximo donde parece que absolutamente nadie mete mano: Gibraltar. Son numerosas las voces que denuncian las evasiones y fraudes que tienen sitio en la colonia británica, y de qué manera los jibraltareños viven realmente bien a costa del dinero que debería revertir en España. España defiende frente a la Unión Europea que en su frontera se sitúa un paraíso fiscal donde de año en año los ciudadanos españoles pierden más de 1000 millones de euros, puesto que la colonia favorece la creación de sociedades offshore como las creadas en Panamá, muy sustanciosas para los adinerados españoles. Además de esto, a este dinero se aúnan los grandes beneficios que se obtienen del contrabando de tabaco y la fiscalidad del juego, una de las industrias que más ha crecido los últimos años en la zona. La industria del juego representa ya el 25 por cien de la economía de Gibraltar.
¿Y cuántas sociedades offshore calcula Hacienda que existen allá? Pues entre treinta y 35.000 operando en la colonia. Gibraltar rebaja la cantidad a unas veinte (que prosigue siendo una cantidad escandalosa. ¿Y por qué escandalosa? Pues Gibraltar tiene 30.000 habitantes, el tamaño de un pueblo pequeño.
Las autoridades españolas han pedido en numerosas ocasiones información al Reino Unido sobre estas empresas, sin conseguir contestaciones satisfactorias o con remisiones a las llamadas sociedades pantalla, que se crean en otros paraísos fiscales para hacer más opaco el acceso a los auténticos dueños. También han insistido ante Bruselas por estimar que esta clase de sociedades pueden ser consideradas igualmente ayuda de Estado.
El fraude del tabaco
El último gran capítulo del fraude a la Hacienda española con origen en Gibraltar lo forma el contrabando de tabaco, una práctica que ha sido denunciada en repetidas ocasiones por las autoridades españolas, y como consecuencia de la cual, la OLAF, la Oficina de la UE de Lucha contra el Fraude, realizó en 2013 una investigación sobre el terreno.
Al término de esa investigación, la OLAF emitió un informe en el que cuantificó en unos 708 millones de euros el perjuicio causado a las finanzas españolas y de la UE en el periodo 2010-dos mil trece, si bien ciertas fuentes del Gobierno español calculan las pérdidas para las arcas comunitarias por contrabando de tabaco en unos doscientos millones de euros por año.
La realidad es que las cantidades de importaciones de tabaco desde Gibraltar de año en año son pasmosas, si se tiene en cuenta que tiene una población de treinta personas e inclusive si se admite que es un sitio muy visitado por turistas. En dos mil once, llegaron a entrar en el Peñón, por vía terrestre, 127 millones de cajetillas. Un par de años más tarde, en dos mil trece, fueron ciento diez millones, una cantidad que se redujo todavía más en 2014 y se situó en la mitad a finales de dos mil quince, con cincuenta y cinco millones de cajetillas, en gran medida como consecuencia de los controles en la Verja.
La menor entrada, así como la mejora en los controles, ha hecho asimismo que haya bajado el número de cajetillas de las que se incautaron las Fuerzas de Seguridad cuando iban a ser introducidas de contrabando en España. En 2015, fueron trescientos treinta y tres mil setecientos treinta y cinco, un 57 por ciento menos de las requisadas en el año dos mil catorce, conforme los datos del Gobierno de España, conocidos por ABC.
Contrabando por mar
Sin embargo, en los primeros meses del presente año, se ha producido un repunte de las importaciones de tabaco por la parte de Gibraltar en un trece por ciento, lo que se atribuye a una mayor actividad por vía marítima, exactamente la misma que es utilizada para efectuar luego el contrabando. En verdad, el Servicio de Vigilancia Aduanera ha detectado una mayor presencia de embarcaciones en la zona.
Además de esto, la Guardia Civil ha comprobado también en las cercanías de la Verja, en La Línea de la Concepción, la congregación de un elevado número de motos y ciclomotores para recoger el tabaco lanzado por encima de la Verja para evitar los controles.
España ha venido llamando la atención en la Unión Europea sobre todos estas prácticas, que estima que son favorecidas por el régimen fiscal vigente en Gibraltar, al tiempo que ha subrayado otro hecho, que es la ausencia de cargas que recaen sobre los residentes en ese territorio frente a las que aguantan las compañías y los ciudadanos que tienen su vivienda en los Estados miembros.